jueves, 23 de diciembre de 2010

Quedishtu


El amanecer era blanco.
Gonzalo Rojas

Llegas mordido de polvo
pesado de sangre
el peto abollado de almas
los ojos cargados al odio
tus pies anduvieron suplicios
tu cabeza sola ya no habla
gruñe un poco de agua
la sed que el infierno no sacia

Eres el extranjero
de lejos te vi
un desperdicio de la mano de los dioses

Los hombres como tú vuelven desechos
sostenidos apenas
hay que religar sus partes

Las partes aisladas sollozan
las partes jirones aguardan
el embrujo divino que junta

Primero: lavo
el agua disuelve toda condena

Segundo: lamo
mi boca urde la trama que eres

Tercero: unjo
mis manos devuelven poder

Cuarto: beso
hay labios que enseñan a orar

Quinto: observo
mis ojos añaden valor

Sexto: hablo
que mi susurro te haga arder

Séptimo: abro
una resistencia para alcanzar más honduras

Octavo: cabalgo
el esfuerzo vale tu hartura

Noveno: recibo
mi cuerpo ha sido tu templo

Décimo: sello
completo te querían los dioses.

No hay comentarios.: